AED Records, 2014
Hace ya mucho tiempo me cautivó en su proyecto Aztec Camera y ahora lo ha hecho de nuevo con su elegancia innata, su dulzura y delicadeza. Roddy Frame, escocés, cantante, compositor y guitarrista, se ha tomado su tiempo para dejarnos ésta maravilla de trabajo tras ocho años desde su última publicación, también en solitario, "Western Skies".
Ha vuelto con un disco exquisito, melancólico y que sabe a él - esa guitarra inconfundible, esos punteos, sin perder esa esencia que le caracterizó desde muy jovencito y con ese corte clásico de puro pop. Producido por él mismo y bajo la distribución del sello discográfico de su gran amigo Edwyn Collins, Roddy Frame consigue ese equilibrio en los arreglos de estudio para que cada tema no pierda su frescura y con ese especial cuidado a la hora de interpretar cada cambio de acorde. Un disco sencillo y honesto, y un personaje carismático, que sabe lo que quiere, y lo hace muy bien.
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